Por nuestra Directora Ejecutiva Lina María Montoya.
Publicado en: ADN
La microempresa es dinámica y sus líderes requieren habilidades para la resolución de problemas de manera permanente. Esto hace que su resiliencia permanezca activa y para darle algo de equilibrio el cuidado de la salud mental es crucial para la sostenibilidad de estas empresas, aunque a menudo se olvida en medio de la lucha diaria.
Los microempresarios enfrentan constantes presiones económicas: ventas, deudas, productividad. A menudo se combina con la falta de descanso y desconexión, esenciales para una mente sana. La salud mental es un pilar fundamental para tomar decisiones acertadas y gestionar el estrés, es un trabajo consciente que hay que activar ya. Aquí tres consejos para una jornada laboral productiva:
1. Establecer una rutina de trabajo: Definir horarios claros para el trabajo y el descanso es esencial. Respetar el tiempo de almuerzo y tomar cortos descansos ayuda a mantener la mente despejada. Aprender a priorizar tareas y delegar reduce la carga de trabajo.
2. Fomentar un ambiente de trabajo saludable: Un entorno positivo, con buena comunicación y apoyo mutuo, reduce el estrés y aumenta la motivación.
3. Establecer límites claros entre la vida laboral y personal es crucial. Apagar el teléfono de trabajo al finalizar el día y dedicar tiempo a actividades de ocio y relajación ayuda a recargar energías.
La salud mental es esencial para el éxito de las microempresas. Priorizar el bienestar mental y el de los equipos, establecer rutinas equilibradas, fomentar un ambiente saludable y desconectar del trabajo son estrategias clave para mantener una mente clara y un negocio en marcha.
¿Para qué las deudas?
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